Aprovecha al máximo tu cosecha
Información ofrecida por: DANIEL OLIVER
Las personas que tienen huerto llega un momento en el que no son
capaces de comerse todo lo que producen las plantas, pero hay muchas
formas de aprovechar ese excedente.
Si nuestro huerto está sano y
bien cuidado llegará el momento de no poder comernos todo lo que
producimos, claro está, siempre en función de los que seamos en la
familia y lo grande que sea nuestro huerto, pero generalmente se
suele dar.
Sobre todo los tomates, calabacines, pimientos y calabazas
son especialistas en llenar la despensa de forma desmesurada y para
no ver como envejecen día a día en nuestra nevera, vamos a dar
algunas formas de disfrutar de esas verduras.
Existen tres formas,
regalarlas, venderlas o conservarlas.
1- Regalar parte de tu cosecha
a familiares, amigos o a gente necesitada puede ser tan gratificante
como comértela, eso si, que sean personas que valoren lo que le
estás dando. Si estás dispuesto o dispuesta a compartir tus
apreciadas hortalizas, hazlo con productos recién cogidos y de
calidad.
2- Vender parte es otra opción, sobre todo si son productos
ecológicos. Hay infinidad de comercios en nuestra población
dedicados a la venta de frutas y verduras que quizá estén
interesados en parte de tu cosecha y si tu huerto es ecológico, te
puedes dirigir a los especializados en este campo. Es una forma de
minimizar los gastos que conlleva tu huerto.
3- Conservar el exceso
de comida para momentos en los que no estén disponibles.
En función
del producto tendremos opción de conservarlas de una o varias
formas.
1-Patatas, boniatos, calabazas, habas, alubias, garbanzos,
guijas, guisantes, melones o sandías son parte de esos productos que
simplemente hay que conservar en lugares frescos, sin humedad y a
salvo de bichillos que quieran merendar a nuestra costa.
2-El secado
es otra opción, sobre todo, pimientos, ajos y cebollas enristradas o
tomates secos con sal.
3– Congelar nuestro género fresco o
precocinado es una buena opción sólo has de tener cuidado con lo
que congelas y el tiempo, el frío puede pochar o quemar tus
verduras.
4-Pero una de las mejores opciones es en tarros de cristal.
Ya sea en crudo o cocinada, tomate frito con pimientos, tomates
escaldados, pimientos verdes en aceite, fritada de calabacín y
berenjena o vinagretas con cebollitas, cornetas o tomates verdes.
Toda una cultura para descubrir en casa con tus hijos, padres o
amigos y así disfrutar de una forma diferente de nuestro huerto,
animaros a intentarlo.