El nuevo Museo Dámaso Navarro Piezas excepcionales para no perderse (parte II)
Si hace unas semanas nos deteníamos en entresacar varias piezas
de la colección arqueológica del Museo Dámaso Navarro, en este
caso hacemos lo mismo pero de la parte etnológica, correspondiendo a
la parte del museo que se ocupa del periodo más reciente del pasado
de Petrer como es el siglo XIX y XX.
Para ello seleccionaremos unos
objetos singulares que se utilizaban en el pasado y que corresponden
a actividades domésticas, artesanales y de la vida cotidiana del
Petrer preindustrial.
Recetario de cocina: Cuaderno de tapas de cartón
de unos 20 cm de altura y con un refuerzo de tela en la parte del
lomo formado por 118 páginas blancas con líneas horizontales. En su
interior hay descritas numerosas recetas de repostería en tinta
negra, con los ingredientes y la manera de elaborarlas.
También
presenta algún dibujo de fontanas realizado en colores. Al final del
cuaderno está el índice de las recetas.
Jarrita de novia: Es una
pieza cerámica de mediados del siglo XX con una altura de 36 cm, que
está formada por dos partes: por un lado, está la tapadera con
forma semicircular rematada con un asidero moldurado con una
decoración bordada vegetal. Y por otra parte, la jarrita propiamente
dicha, con una base talonada y con peana que lo une al cuerpo que
tiene forma cilíndrica.
La parte superior corresponde al cuello con
el borde. Tiene dos asas dobles a cada lado. Toda la superficie
presenta una decoración bordada.
Fuelle de herrería: Es un mecanismo
de madera y cuero con cierres metálicos que se empleó en una
antigua herrería de finales del siglo XIX y principios del XX. De
forma circular, con una salida rectangular, se empleaba en el proceso
de fundición y forja de metales. El aire exhalado por el fuelle
alimenta el combustible del fuego, aumentando su temperatura y
logrando alcanzar el punto necesario para la fundición de metales.
Juego de mesa: la oca: Es un tablero de unas dimensiones de 37 x 33
cm, realizado en madera y cartón, preparado para que puedan
participar más de dos jugadores y que consiste en una competición
para llegar el primero a la última casilla empleando un dado.
Durante el desarrollo del juego hay casillas especiales que pueden
alterar el avance hacia la meta. La sirena antiaérea de la Guerra
Civil Es una pieza formada por dos partes: un motor eléctrico en la
parte inferior y una pieza formada por dos cilindros concéntricos
metálicos cuyo roce es lo que provoca el sonido.
Tiene en su parte
inferior el número 380 que corresponde al número de serie de la
sirena. Estaba instalada en el tejado de la fábrica de García y
Navarro durante la Guerra Civil y servía para avisar a los
trabajadores y a la población de la llegada de la aviación enemiga,
por lo que debían de acudir a los refugios. Posteriormente siguió
funcionando para avisar de la hora de entrada y salida del trabajo.
PARA SABER MÁS: Como dijimos hace unas semanas, volvemos a
invitarles a conocer el nuevo Museo Dámaso Navarro, en el que
encontrarán estas piezas y otras muchas que explicar la historia de
nuestra población. El horario del museo es de lunes a viernes de 10
a 14 h, y los sábados, domingos y festivos, de 11 a 14 h.