En la Biblioteca municipal, este pasado jueves 26 de mayo, tuvo lugar un encuentro con el escritor Gustavo Martín Garzo de quien pudimos conocer la riqueza de su brillante trayectoria literaria. Pedro Payá director de la Sede Universitaria consiguió traerlo de nuevo a nuestra ciudad y durante la presentación glosó su figura destacando todas las publicaciones y galardones que ha venido atesorando desde sus inicios.
Así, con este encuentro, nuestra Asociación de escritores Gramática Parda culmina los actos que se han venido realizando en esta primavera bajo el título Quincena Cultural.
Previa lectura durante estas últimas semanas de su libro “El árbol de los sueños”, el escritor realizó una amena y meditada exposición de los pasajes más representativos de su obra con referencia continuada a las fuentes inspiradoras que lo han llevado a escribirla: El Decamerón, Los cuentos de Canterbury y, sobre todo, Las mil y una noches.
Pudimos deleitarnos escuchando sus reflexiones, sus certezas, sus ideas sobre la vida, la literatura y el mundo de los sueños, a través de frases que pude anotar a vuelapluma como: “El árbol como símbolo de la ramificación de los sueños más allá de lo real, de la tierra”; “La realidad había perdido espesor y recurre a la literatura para darle densidad a la vida a través del relato que acompaña al hombre desde el origen de los tiempos, tratando de profundizar en el corazón humano, allí donde anidan los deseos, los sueños y los pensamientos más profundos”; “Solo hay dos vidas: la real y la de los pensamientos”; “La misión de la literatura es la de llevarnos más allá de la vida que vivimos”; “El contar historias es un arte de la seducción”; “El mundo de la ficción es el mundo de la libertad”; “A todo narrador le gustaría escribir su libro que contuviera todo”; etc.
Durante las dos horas que duró el evento, el mundo onírico invadió nuestros pensamientos alejando a los presentes de las preocupaciones que traíamos con nosotros antes de escuchar su intervención. Fue un bálsamo de alivio y reflexión constante que nos hizo transitar por un sendero de sueños y de trascendencia, más allá de lo cotidiano y de lo vulgar; porque Gustavo Martín Garzo se encontraba cómodo y esa sensación de placidez nos la contagió, afortunadamente.
Su literatura, limpia y precisa, usa palabras con las que compone un relato encadenado sin fisuras, cargado de concreción y de belleza. Su técnica de incorporar preguntas abiertas sobre las reflexiones del proceder de los personajes lleva al autor a actuar como un cirujano del diccionario que busca la certeza de su oficio en cada intervención, para que el lector se pregunte a sí mismo y se responda sin concederle pábulo a la duda. En el fondo de los asistentes ha dejado una huella que invita a leer sus libros y acompañar con placentera lucidez las reflexiones que impregnan y definen la estela de sus sueños. Así lo haremos.
Juan Manuel Martínez. Presidente de Garmática Parda
