La ruta de las dunas
POR: LLUÍS FRANCÉS
La ruta de esta semana es de dificultad media y su duración
oscila entre las dos horas y media o las tres, según la velocidad de
la marcha que imprimamos.
Se denomina de Las Dunas, porque en ella
recorremos y conocemos buena parte de las dunas continentales que
alberga el norte del término municipal de Petrer. Iniciamos el
recorrido en el Arenal Menut, situado junto al afamado Arenal de
l´Almorxó, ecosistema protegido bajo la tutela de Paraje Natural
Municipal.
Para que resulte más fácil podemos comenzar la ruta
desde la caseta de información situada frente al conjunto dunar.
Desde este punto enfilamos la vereda que sube al monte del Rutllo que
va al antiguo campo de tiro a pichón, situado entre las partidas de
Aiguarrius y Santa Bárbara. Una vez en lo alto nos dirigimos a la
izquierda por una senda que nos hace crestear este montículo hasta
llegar a la Costera del Tibero, cruzamos la famosa senda que nos
lleva a Petrer o Caprala.
Nuestro camino es la senda del arenal de
Pruna y en nuestro recorrido atravesaremos pequeños campos que en
épocas de siembra son plantados con trigo para que las perdices y
otros animales tengan sustento. Dejaremos la Cova de Boira a la
derecha y comenzaremos a subir por el antiguo camino que abrieron
para esquilmar el antiguo arenal de Pruna hasta llegar al pie de la
antigua duna.
Pruna es una de las dunas continentales de Petrer,
afamada por haber desaparecido casi en su totalidad a finales de los
años sesenta, debido a la extracción de su arena para la
construcción. En la actualidad, es toda una sorpresa ver la
regeneración de este arenal de origen eólico. En la ladera de la
duna encontramos grandes cantidades de arena, pero la sorpresa está
aún por llegar.
Nuestra ruta continúa por la senda que nos lleva
hasta la parte más dura de este recorrido, la subida al Collado
Gordo de 725 metros sobre el nivel del mar. En los meses de junio y
julio, por esta zona podemos recolectar la digestiva manzanilla que
brota, no en demasía, en este lugar. Una vez en la cumbre del
Collado Gordo, tenemos la posibilidad de tomar dos caminos para
volver a nuestro punto de partida, bien por la cresta de la umbría
de Marcos o bien por el fondo del valle pasando por el campamento de
Caprala.
Si optamos por la primera opción hay que continuar por la
senda de la izquierda hasta coronar la cima donde se encuentra la
Creu de Caprala. Desde ese punto se contempla una impresionante vista
del valle con el caserío en el centro y rodeado de pinares, zonas de
cultivo y casas de campo. Es, sin duda, una zona muy especial. La
senda nos llevará cresteando en dirección de vuelta hacia el Rutllo
y a mitad de camino nos encontremos caminando entre pequeñas dunas
de arena que no es otra cosa que los restos del antiguo arenal de
Pruna, aunque hay quien apunta a que se trata de una incipiente
regeneración de la capa dunar.
La verdad es que la sensación es muy
agradable e invita a elucubrar sobre su futuro. No obstante, los
restos de la antigua duna están cubiertos ahora de monte bajo y
pinos de considerable tamaño. Desde allí se contempla con toda
claridad los arenales Menut y l´Almorxó. Para volver hasta la senda
del Tibero seguiremos en dirección sur tomando como referencia los
mojones que en esta zona son muy numerosos.
Una vez en la senda
tomaremos la dirección de Caprala (a la derecha) y bajaremos casi
hasta el cauce de la rambla, muy cerca del denominado Paseo de las
Dunas que está perfectamente señalizado hasta llegar de nuevo a la
caseta de información del Paraje Protegido. Para la segunda opción
deberemos coger, desde el alto del Collado Gordo, la senda que nos
lleva al albergue de l´Avaiol, en este caso descendiendo en
dirección noreste. A unos quinientos metros, aproximadamente,
encontramos una senda hacia la izquierda que nos lleva al campamento
de Caprala por la umbría de Marcos.
Este recorrido es muy frondoso,
con bosque y con descenso lento por la pendiente de gran desnivel. A
escasos metros del campamento y sin llegar a verlo, encontramos una
ruta dirección suroeste que nos lleva también al campamento. Por
esta senda caminamos cerca de quinientos metros por dunas de mediano
espesor, muy comunes en la ladera norte de la umbría de Marcos.
Desde el campamento, seguimos la senda hasta el arenal de l´Almorxó,
pasando por el Paseo de las Dunas, con unas vistas excepcionales de
ambas formaciones arenosas.
