De pena
Este pasado domingo se celebró en el teatro Cervantes un
concierto dedicado a uno de los compositores más famosos de la
música europea, Amadeus Mozart. Fueron alrededor de 25 músicos bajo
la dirección del que lo fuera de la Asociación Musical Virgen del
Remedio, D. Octavio J. Peidró quienes nos deleitaron con una pieza
musical de dicho compositor.
El premio a la brillante interpretación
de esta obra no fue atronador, ni mucho menos, pues en la sala nos
encontrábamos, contadas una por una, 34 personas, parte de ellas de
Elda, que sí nos afanamos en suplir con nuestros aplausos tanta
butaca vacía. Mientras, me pregunta, de qué pasta serán estos
músicos y su Director que, lejos del desánimo al ver tan escasa
asistencia, parecía que estaban tocando en una sala abarrotada de
público.
Cuánto dicen tantas ausencias de nuestra cultura musical y
qué poco en favor de las dos bandas locales, con sus
correspondientes educandos, el interés que demuestran en
acontecimientos musicales como este o en otros conciertos en los que
también hemos constatado parecida situación.
Da la impresión que a
gran parte les gusta tocar para sus desahogos musicales pero ante
cualquier concierto de la categoría musical que sea, si van, bien y
si no, también. O sea, interpretar sí pero escuchar y apoyar con su
asistencia a compañeros, más bien, no. R.A. que acudió a tan
brillante concierto.
