Pedaleo sin perder el rumbo de mi sueño,
dentro del perímetro de tu latido,
siguiendo el sentido que pierde a mi razón
despertando mi corazón de su andar rendido.
Pedaleo a sabiendas de la cuesta y el camino,
oyendo el trino de la ilusión portadora,
incansable y a deshoras va llevándome el corazón
ausente de reloj, con la vida que lo atesora.
Pedaleo sin temor soltando lastres insolubles,
con los pinceles azules para dar capas al cielo,
con el zurrón lleno de sentimientos y sensaciones
tarareando las canciones que nos cantan lo nuestro.
Pedaleo sin mirar atrás y sin planes de llegada,
sujeta al asa de tu alma, verbo en acción,
con este deseo atroz de aterrizar donde esperas
que sigas siendo la tarea que encomendó tu corazón.
Pedaleo sin prejuicios hacia adelante,
conociendo el bagaje de mis instrumentos,
todos los sentimientos y la rebeldía de mi carne,
caminando por el lado más salvaje y más sincero
a corazón abierto y con la inercia de un ave.
Mayte Salguero
