Por: Amparo Blasco Gascó
Fueron muchos los petrerenses los que se sumaron a la rememoración de la tradición de subir al castillo el Día de Santa Bárbara para plasmar su firma o pequeña dedicatoria en un gran mural habilitado para tal fin, imitando a aquellos que lo hacían en los muros de la fortaleza hasta la década de los 70 del pasado siglo XX. Como en ediciones anteriores, la Tourist Info también llevó a cabo la actividad del “Bucanero Aventurero de Adviento”
Hace ya seis años, en concreto, en diciembre de 2016, la concejalía de Cultura y Patrimonio decidió recuperar la tradición de Santa Bárbara cuya festividad se celebra el 4 del último mes del año.
La intención de ese departamento municipal no era otro que el de rememorar las tradición de subir ese día al castillo y en alguno de sus muros grabar una fecha, un nombre o una breve frase.
Esta costumbre parece ser que surgió de forma espontánea y que se remonta a principios del pasado siglo XX pero que desapareció en la década de los 70, coincidiendo con la restauración del castillo-fortaleza.
La rehabilitación de ese emblemático monumento de Petrer trajo consigo que la mayoría de esos grabados desaparecieran, aunque se conservan algunos en las paredes del calabozo de la torre de los años 30 del siglo XX.
Para recuperar esa tradición, el domingo más cercano al 4 de diciembre, que este año ha coincidido con la festividad de Santa Bárbara, en el interior del castillo, generalmente en el patio de armas, se habilita un gran mural para que todo el que lo desee pueda plasmar su firma, una fecha determinadas, unas iniciales o alguna pequeña dedicatoria, aunque este año debido a las inclemencias meteorológicas, se decidió ubicarlo en la Sala Capitular de la fortaleza.
Una iniciativa que suele complementarse con distintas actividades que varían de año en año, destacando, entre ellas, la apertura del calabozo de la torre que solo se puede visitar en dos ocasiones al año, bien durante las Jornadas de Puertas Abiertas del Patrimonio de Petrer o bien en la conmemoración de la tradición de subir al castillo el Día de Santa Bárbara.
Un calabozo que había permanecido cerrado a cal y canto estos últimos años debido a la pandemia pero que este pasado domingo volvió a abrir sus puertas, siendo visitado por cientos de personas que pudieron ver de cerca los grafitos históricos que pintaron los esclavos que allí permanecieron encerrados, datados del siglo XVI, así como algunos mucho más recientes.
La concejalía de Cultura y Patrimonio se ha mostrado muy satisfecha con la edición de este año puesto que ha sido una de las jornadas con mayor respuesta de público desde que se recuperó esta tradición en diciembre de 2016.
Las visitas se programaron entre las 11:00 y las 14:00 horas y durante ese tiempo fue un continuo trasiego de personas las que acudieron al castillo a visitarlo y a dejar un recuerdo plasmando su firma en ese gran mural habilitado para tal fin.
Bucanero Aventurero de Adviento
Coincidiendo con la tradición de Santa Bárbara, un año más, la Tourist Info llevó a cabo la actividad del “Bucanero Aventurero de Adviento”.
Cerca de 500 personas, entre niños y padres que los acompañaban, participaron en esta iniciativa, más de 180 durante la jornada del sábado y 300 en la del domingo.
El objetivo de esta iniciativa no era otro que, a través de la realización de una gymkhana, los pequeños conocieran diferentes ubicaciones del casco antiguo así como contribuir a la decoración navideña de la Tourist Info.
El punto de partida era la Tourist Info donde se les entregaba un mapa, un gorrito navideño a modo de bolsa y unas instrucciones que debían de descifrar para saber que el próximo destino era el Museo Dámaso Navarro para poder jugar a “un memo”. De allí se dirigieron al Antiguo Cementerio donde tenían que descifrar la siguiente ubicación que no era otra que la hornacina de la Virgen del Remedio para continuar el recorrido hasta el castillo.
En una de las salas de la torre más alta de la fortaleza, recogieron una tarjeta en la que plasmaron un deseo que, posteriormente, colgaron en una de las salas de la Tourist Info.
La actividad continuó con la visita a dos plazas, Plaça de les Ànimes y Plaça dels Llenyaters. Esos escenarios realizaron una serie de juegos para lograr una bola de navidad que, más tarde, cada uno de los participantes fue colgando en el Árbol de Navidad de la Tourist Info.
