Luis Rico Navarro/ El atleta malagueño afincado en Petrer, José Miguel García Acosta, correrá este mes de abril, concretamente a partir del día 14, la mítica y extrema prueba denominada “Maratón de Los Sables” al sur del desierto del Sahara.
Este corredor de ultras se marcó como objetivo disputar alguna vez esta carrera en el año 1987, cuando vio en televisión a unos “locos” corriendo cargados con mochila en el desierto. En ese momento, convirtió en un sueño el poder estar allí y ahora le ha llegado el momento de cumplir su sueño.
Se trata de una prueba muy exigente de preparar y durísima ya que los participantes deben recorrer 252,8 kilómetros, divididos en 6 etapas, y en autosuficiencia, es decir, cada corredor carga con todo el material durante la carrera. La mochila contiene comida liafolizada para los 9 días de estancia, saco de dormir, bomba aspiraveneno, manta térmica, hornillo, cuchillo, brújula, etc., con un peso aproximado de 9 kilos.
Las temperaturas a soportar son realmente altas, entre 35 y 40 grados centígrados, pudiendo superar la barrera de los 50 grados, lo que contrasta con la radical bajada nocturna donde el termómetro cae hasta los 4ºC.
Una auténtica aventura que traspasa lo meramente deportivo y en la que los 1.200 atletas de 55 nacionalidades deberán lidiar con las dolorosas ampollas, motivo por el que se retiran más corredores.
