El Poblet de Petrer: hacia su justo reconocimiento patrimonial (y II)
Por: Boni Navarro y Fernando Tendero
En febrero de 1939 [cuando Negrín se instaló en la zona de
Elda-Petrer, en la Posición Yuste] su gran objetivo era salvar
vidas, evacuar a miles de responsables políticos, sindicales,
militares republicanos desde los puertos mediterráneos y con los
barcos de lo que quedaba de la flota, que estaban en Cartagena.
Pretendía oponer una resistencia elástica que no sabemos si hubiera
podido mantener. Sin embargo, Negrín actuaba sin conocer la
estrategia de Franco, que deseaba provocar una implosión de la
República desde dentro, a través del coronel Segismundo Casado.
Mario Amorós (2014):
75 años después. Las claves de la Guerra Civil Española.
Conversación con Ángel Viñas.
Como ya se expuso la semana pasada, la finca El Poblet, también
conocida en clave militar como Posición Yuste, fue la última
residencia del Gobierno de la II República en 1939 antes de marchar
al exilio.
Este importante acontecimiento de la historia de España ha
motivado que desde hace años, tanto asociaciones como grupos
políticos, hayan instado a la Generalitat Valenciana a tramitar la
declaración de El Poblet como BIC (Bien de Interés Cultural) por
ser ésta la figura de mayor protección y conservación patrimonial
que posee el Estado según recoge la Ley 16/1985, de Patrimonio
Histórico Español, y la Ley 4/1998, de Patrimonio Cultural
Valenciano, con sus modificaciones posteriores.
El reconocimiento
como BIC, también conlleva la visita a la finca al menos cuatro días
al mes, lo que permitiría su conocimiento a la sociedad de un bien
histórico al que actualmente no se puede acceder al público al ser
propiedad privada.
Siendo prioritario conseguir la protección, conservación y
disfrute controlado de este sitio emblemático, también se debería
de valorar la posible adquisición de la finca a través de las
distintas formas legales existentes, contando con la necesaria
participación económica de los organismos superiores encargados de
velar por el patrimonio cultural como pueden ser la Conselleria de
Educación, Investigación, Cultura y Deporte, o el propio Ministerio
de Educación, Cultura y Deporte.
Este proceso de declaración de BIC para El Poblet es el que se ha
solicitado a la administración competente desde hace casi diez años,
ya que la primera solicitud fue presentada el día 12 de noviembre de
2008 por parte del Centre d’Estudis Locals del Vinalopó ante la
Conselleria de Cultura.
Desde ese momento, han sido numerosas las tramitaciones
administrativas que se han llevado a cabo, pudiendo incluir en estas
páginas algunas de las más representativas. Del ámbito regional se
pasó al estatal, concretamente al Congreso de los Diputados, cuando
el diputado por Izquierda Unida Gaspar Llamazares, con fecha 20 de
enero de 2011, hizo una pregunta al Gobierno sobre las medidas que
estaría dispuesto a adoptar para la recuperación de El Poblet.
La
respuesta dada por el secretario de Estado de Asuntos
Constitucionales y Parlamentarios fue que “el Ministerio de Cultura
está abierto a estudiar la propuestas de colaboración con la
Generalitat Valenciana y el Ayuntamiento de Petrer, habida cuenta de
que su posible declaración como Bien de Interés Cultural es
competencia autonómica”.
Posteriormente el Pleno del Ayuntamiento de septiembre de 2011,
por unanimidad, acordó sumarse a la petición de BIC ante la
Conselleria de Educación, Cultura y Deporte, siendo avalada la misma
por la Comisión de Cultura y Educación al año siguiente. También
el Consell Valencià de Cultura, tras girar visita a la finca, apoyó
en el año 2014 su catalogación como BIC, al igual que el Pleno de
la Diputación Provincial de Alicante ese mismo año.
Desde la Dirección General de Patrimonio Cultural se respondió
que, en una primera valoración, por sus características se debería
de considerar más su protección como Bien de Relevancia Local que
como Bien de Interés Cultural, pero que se estudiará desde una
perspectiva más amplia en relación con los otros elementos
patrimoniales de este periodo y que efectivamente “pueda resultar
el inmueble de mayor relevancia en relación a la Guerra Civil en
todo el ámbito territorial de la Comunidad Valenciana”.
Mientras se tramita este ya largo proceso, desde el Ayuntamiento
se siguen dando pasos para conseguir aumentar su protección tal y
como se recomendaba desde la Dirección General de Patrimonio
Cultural.
Así, en el año 2016 se modificó la categoría que tenía
la finca por la de Bien de Relevancia Local (BRL) a la espera de
poder alcanzar pronto la calificación Bien de Interés Cultural
(BIC) en la categoría de Sitio Histórico que es lo que en justicia
consideramos que se merece El Poblet.
La indudable importancia histórica que tuvo este enclave en los
últimos días de la guerra, unido al interés que muestran numerosas
personas por conocer este periodo histórico, favorecen que se pueda
activar el proyecto de turismo cultural encargado en su día por la
Mancomunidad del Valle del Vinalopó a la Universidad de Alicante, y
que abarcaría no solo El Poblet, sino diferentes lugares de Elda y
Monóvar vinculados a los momentos finales de la guerra, cuyo
recuerdo y significación histórica debe tener su justo
reconocimiento patrimonial como BIC.